Las casas prefabricadas están ahora mismo en un boom inmobiliario por ser una alternativa más económica y accesible a una vivienda tradicional. Las puedes encontrar fabricadas en distintos materiales, pero ¿es todo tan bonito como nos lo pintan? ¿merecen realmente la pena? ¿Qué inconvenientes tienen?
Las grandes ventajas de este tipo de casas
Son más baratas
Evidentemente, la gran ventaja de una casa prefabricada es su precio. Suele ser inferior a las realizadas de manera tradicional, en torno a un 30% menos, todo ello gracias a que su proceso de construcción es estandarizado y se realiza a través de un sistema constructivo que está pensado para optimizar.
En la construcción de casas prefabricadas al fabricarse de manera industrial, se ahorra también en mano de obra.
Otra cosa que puede afectar al precio de una casa prefabricada es los materiales que emplees, los acabados, las dimensiones y las modificaciones que realices sobre el modelo estándar de la casa. Siempre tenlo en cuenta a la hora de escoger tu casa porque puede encarecerla.
Se tardan menos en construir y en instalar
Se calcula que las casas prefabricadas se terminan en menos de la mitad del tiempo que lleva construir una casa de obra tradicional, son mucho más rápidas de levantar.
Todo dependerá de si la casa se construye por módulos o no; de si se hace directamente en el sitio en el que será instalada o viene trasladada de fábrica. En cualquier caso, su tiempo de creación es menor al de las casas tradicionales.
Recuerda que al estar construidas en fábricas, utilizando técnicas y procesos industriales, el tiempo de construcción juega a nuestro favor. De hecho, aunque para tenerla lista se tarda unos pocos meses, para el montaje solo se necesitan unos días.
Sí, se ahorra mucho tiempo, pero no te librarás de algunos trabajos como la cimentación, los suministros de agua, luz y saneamiento, que deben hacerse igual que en otro tipo de vivienda.
Se pueden personalizar e incluso ampliar
Aunque no pasa con todas, una de las ventajas que este tipo de viviendas ofrece al cliente es su personalización.
Muchos modelos, la mayoría, vienen prediseñados, pero hay fabricantes que aunque tengan un proceso estandarizado te permiten introducir correcciones y modificaciones en acabados, diseños y materiales para que tengas una experiencia más personalizada a tus necesidades.
Algunas de ellas, no solo se pueden personalizar, sino que están preparadas para poder ampliarlas en caso de que lo necesites. Y lo mejor de todo, que se hace en poco tiempo y sin tener que soportar obras molestas.
Son más sostenibles y eficientes
Una casa prefabricada supera el grado de respeto al medio ambiente durante su montaje al compararla con una de obra convencional, donde toda la actividad se realiza sobre el propio terreno que soporta el impacto ambiental.
Al llevar un proceso industrial, optimiza materiales y energía, y minimiza los residuos, por lo que genera un menor impacto ambiental, por eso son menos perjudiciales para el medio ambiente.
Si comparamos el aislamiento térmico con los sistemas tradicionales de construcción, también es superior, eso es porque en las casas de obra normal, utilizan un sistema que obliga a la construcción de puentes térmicos, lo que ocasiona que los inmuebles tengan porosidades y permeabilidades generando pérdidas de energía.
En el caso de las casas prefabricadas no es así, y por eso pueden mantener temperaturas internas agradables durante el invierno, y también puedes estar cómodo y confortable en verano.
Pueden ser más resistentes
Las casas prefabricadas que se fabrican con hormigón como materia prima tienen la particularidad de ser más resistentes que las casas de obra tradicional. Resisten mucho mejor el paso del tiempo, y disminuyen la posibilidad de daños estructurales, incluso frente al fuego.
En el caso de las casas de madera, en un clima que no sea extremo y que lleve su correcto mantenimiento, tienen un gran nivel de durabilidad y resistencia. Si no date cuenta en edificios antiguos que después de años y años todavía siguen en pie teniendo vigas de madera intactas.
Desventajas, que no lo son tanto
La financiación
En algunos países como España, hay bancos que todavía no ofrecen créditos hipotecarios para casas prefabricadas. El hecho de que se puedan desmontar y trasladar hace que aún se las considere como bienes muebles y no como bienes inmuebles.
Es por eso por lo que la mayoría de entidades bancarias solo facilitarán un crédito si la casa tiene un proyecto de ejecución y de licencia de obras, y no una hipoteca.
Ignorancia y rechazo cultural
Las personas tienen una idea muy equivocada sobre las casas prefabricadas, que las consideran de menor calidad que las tradicionales, aunque estas cumplen con los requisitos de habitabilidad establecidos por el código Técnico de Edificación.
Algunos prejuicios también vienen de las empresas low cost de casas prefabricadas, por eso es mejor que no te dejes engañar por precios demasiados baratos, una casa prefabricada de buena calidad es más barata que una tradicional, pero su precio no está tirado por los suelos.
La ubicación
La ubicación de una parcela es clave, ya que encarece su precio final. Si escoges instalar tu casa prefabricada en un terreno urbano siempre vas a pagar más que si la quieres instalar en la periferia o las afueras, ya que el precio del terreno varía dependiendo del lugar donde la quieras instalar.
A eso tienes que sumarle los gastos de cimentación y de saneamiento, que tienen que ser como los de una vivienda habitual.
Trámites y legislación
Las viviendas prefabricadas deben cumplir con el Código Técnico de la Edificación, como si de un inmueble convencional se tratara. En este sentido, las licencias son iguales para todas las construcciones, y deben cumplir con la normativa urbanística del terreno.
Mantenimiento
El mantenimiento de una casa prefabricada va a depender mucho del material en la que está construida, ya que aunque las más actuales tienen una gran durabilidad, hay que llevar a cabo los cuidados y mantenimientos que necesiten.
Las de hormigón y acero no requieren prácticamente de mantenimiento, pero sí las de madera, que aunque estén fabricadas de madera de calidad, necesitarán un mínimo mantenimiento, como puede ser un barnizado para proteger y tratar la madera cada varios años. Por eso, este tipo de material no está recomendado para lugares con condiciones meteorológicas extremas.
Casas prefabricadas ventajas e inconvenientes
En definitiva, hoy en día hay casas prefabricadas tan buenas como las construidas de manera tradicional, y aunque las casas prefabricadas tienen sus ventajas y también sus desventajas, lo mejor es que valores con calma todas las posibilidades que tienen para ofrecerte y veas si estas casas son para ti, vivas en España, Colombia, Argentina, o en cualquier otro lugar del mundo.
